Tarde noche de teatro, entras a un pequeña sala en la que los actores, el ambiente y la música te trasladan a una discoteca, donde sin quererlo tus ojos se centran y observan a cuatro jóvenes, dos chicas y dos chicos (Sergio San Millán, Ferri Ballester, Jesús Redondo y Sara Ruíz Sardón), que seguro que entre una multitud no llamarían la atención. Da comienzo en La Sala Intemperie, Yo, NUNCA, de la Compañía Krisol, dirigida por Alba Navarro y Manuel Campos, un grito joven y actual que aboga por la liberación de la mujer en todos los aspectos de la sociedad, hasta el 27 de febrero.
La obra se desarrolla a partir de ese momento, mediante numerosas actuaciones paralelas entre los personajes, algún flashback y monólogos, reacciones cotidianas que te hacen reír, pensar e incluso asentir recordando que en algún momento te ha pasado o lo has pensado.
Se nota que lo han escrito a partir de experiencias (o estamos ante un esplendido trabajo de empatía), porque logran transmitir naturalidad y veracidad en cada situación. Su alegato no pretende aleccionar a nadie sino hacernos reflexionar poniéndonos en la piel del otro. Al final te sobrecoges por una gran historia.
Una gran historia que te deja la boca abierta y la mente en un torbellino de ideas y pensamientos a los que nunca habías llegado. Rompiendo con todos los clichés que acompañan al concepto violación, Yo, NUNCA habla de las violaciones dentro de la pareja, de esas de las que no se habla, de las que ni siquiera la víctima es consciente. Sin mencionar la cantidad de abusos que hemos visto en películas y series, que ni si quiera sabíamos lo que realmente eran, o a las que no damos importancia, como en Juego de Tronos (2011-2019) o Thelma y Louis (1991).
Gracias a un guión meditado y rebelde y a la brillante interpretación de los cuatro actores, Yo, NUNCA consigue su objetivo, realizar viaje subversivo a las raíces mismas de lo que se ha denominado cultura de la violación para esclarecer las causas y consecuencias de lo que se supone un problema social de enorme magnitud. Estamos ante una obra valiente, sincera y lo más importante, directa. Una verdad que pide a gritos que pare. Unos hechos que merecen ser vistos, entendidos y denunciado por todos.
Yo, NUNCA es un equilibrio en el profundo contraste que es en sí todo el montaje; contraste entre lo lúdico y lo desgarrador, lo cómico y lo trágico, lo apocalíptico y lo esperanzador, lo público y lo privado.
Sin otro fin que impactar y activar al espectador en una nueva forma de encajar la cuestión del género y la sexualidad en la sociedad que le rodea, apuestan por un código simbólico y conceptual que alude directamente a lo sensorial, sin escapar del poder inmediato de la palabra que, cuando es mordiente, feroz y directa, se vuelve un huracán difícilmente apaciguable.
Pases en La Sala Intemperie (Calle Velarde,15) desde 12€:
Miércoles 13 de Febrero a las 20:30h
Miércoles 20 de Febrero a las 20:30h
Miércoles 27 de Febrero a las 20:30h
Comments