Ficha
Título: Los archivos del Pentágono
Título original: The Post
País: EE. UU.
Director: Steven Spielberg
Guion: Liz Hannah, Josh Singer
Reparto: Meryl Streep, Tom Hanks, Bruce Greenwood, Bob Odenkirk
Género: Histórico, Drama
Puntuación: 2,5/5
Steven Spielberg no necesita presentación, pero si alguien me la pidiese, diría que es un señor más bien tirando a pequeñito que se baña en una piscina de dólares como un Tío Gilito con gorra de beisbol.
Es lo que tiene haber creado el cine de palomitas y refrescos, que te afianzas con cada proyecto cada vez más en la lista Forbes de hombres más ricos del mundo.
Spielberg es un tipo riquísimo, pero es un lujo que nos tenemos que permitir. Ha dignificado todos los géneros populares, desde la ciencia ficción hasta el cine de aventuras, y como mínimo ha hecho una película genial para cada uno de nosotros.
Mi Spielberg es de El Imperio de sol (1987) y ahora el director ha querido que haya un spielberg para todos los aficionados a un subgénero propio del cine americano, el cine sobre periodismo.
La cinta se centra en la toma de decisión de Katherine Graham (Streep), la dueña de The Washington Post, y el director de la cabecera, Ben Bradlee (Hanks), de atreverse a publicar los archivos filtrados sobre los encubrimientos gubernamentales de la guerra de Vietnam, pese a la negativa judicial y de la Administración Nixon de que The New York Times, su competidor, siguiese adelante con el escándalo.
Es una defensa correctísima de la libertad de expresión. El problema es que, pese al mensaje de la película, el filme parece no interesar más allá del campo norteamericano. Se dan muchos datos por sabidos para que el espectador español pueda entender todos los matices y comprender la historia. La cinta está rodada con maestría, tanta que es académica y no llega a emocionar.
Meryl Streep demuestra una vez más que es capaz de hacer lo que le venga en gana y Tom Hanks hace de Hanks y se arremanga para parecer un periodista de librillo, pero últimamente está poco convincente y algo monótono.
En definitiva, una película de escuadra y cartabón, con momentos de maestría como la secuencia de la conversación telefónica a varias bandas, pero poco interesante. Es el spielberg hecho para el goce de los académicos y de los periodistas de investigación.
Tendremos que esperar hasta finales de marzo para que estrene su última película, ésta más comercial, menos seria, menos “adulta”. Creo que entonces sí que vamos a soñar con el mago del celuloide.
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