El Día Internacional del Cocido se celebra cada año el 27 de febrero, siendo uno de los platos más populares y antiguos de la cocina tradicional española. Con una creciente fama tanto dentro como fuera de la piel de toro, este año el hotel Barceló Imagine recibe a sus clientes y huéspedes con una interpretación del clásico plato típico madrileño en su versión más sana y sin producto de origen animal: el Vegan Cocido Madrileño.
Con esta iniciativa el hotel madirleño, considerado uno de los máximos referentes hoteleros de España en materia de ocio y entretenimiento gracias a su posicionamiento musical, ofrece la posibilidad de vivir esta conmemoración mediante una comida que reúne en un mismo plato los nuevos alimentos favoritos para un cocido vegano perfecto.
Vegan Cocido Madrileño
El primer hotel musical de Madrid cuenta con el único Vegan Cocido Madrileño, creado especialmente por el hotel para este día del calendario. Inspirado en este gran hit de la cocina española, Vegan Cocido Madrileño es la nueva versión vegana del típico cocido madrileño que, sin duda, triunfará entre los adeptos a la gastronomía veggie. Una propuesta gastronómica de tendencia que llega para quedarse en su carta de invierno y que se podrá disfrutar por 29€ todos los viernes al mediodía.
Confeccionado con mucho esmero y a fuego lento, el menú consta de las clásicas croquetas de cocido vegano y una selección de encurtidos de la tierra. Le siguen los clásicos vuelcos de este plato castizo por antonomasia; el primero consta de un sopamen vegano con fideos de trigo sarraceno; mientras que el segundo se compone de verduras -nabo daikon, calabaza, zanahoria, patata y la col asiática pak choi– rehogadas con aceite de ajo y pimentón, y servidas junto con garbanzos lechosos, morcilla de calabaza, chorizo vegetal y buñuelos de la abuela.
Como colofón final a esta comida tan especial, un postre que hará las delicias de los fanáticos del chocolate: tarta de chocolate vegana y helado de vainilla. Toda una experiencia única que apunta a Barceló Imagine en uno de los nuevos enclaves a no perderse en la ruta vegana madrileña.
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