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Foto del escritorRedacción

El adiós en la pasarela de la reina de la elegancia, Carolina Herrera



La diseñadora venezolana Carolina Herrera presentó su última colección como directora creativa de la firma en el MOMA de Nueva York. A sus 79 años y tras más de 35 años en el mundo de la moda se retira dejando como director creativo a su mano derecha, al diseñador Wes Gordon. Aunque no se retira por completo porque será embajadora mundial de la firma. Durante el desfile contó con un público muy especial, donde se escontraba su marido Reinaldo Herrera y sus hijas: Patricia, Carolina, Mercedes y Ana Luisa; además de grandes amigos como Calvin Klein.

Su nombre completo es María Carolina Josefina Pacanins, nació en Caracas en el año 1939 dentro de la alta sociedad venezolana; ya que su padre fue gobernador de la capital y su madre pertenecía a una de las familias más influyentes de la época. Se casó a los 18 años con Guillermo Behrens Tello, el padre de sus dos primeras hijas, Mercedes y Ana Luisa. Posteriormente se divorció y en 1968 contrajo matrimonio con Reinado Herrera, aristócrata venezolano.


Inició su carrera profesional en el mundo de la moda en 1981 cuando vivía en Nueva York creando su propia empresa y posteriormente celebró su primer desfile, que fue muy bien aceptado y empezó a ser conocida. En 1986 confeccionó el vestido de boda de Caroline Kennedy, lo que le abrió las puertas en la alta sociedad estadounidense; convirtiéndose en una de las firmas más importantes del país.

En el desfile de despedida se pudo ver la colección de otoño-invierno 2018-2019, donde claramente destacó la elegancia propia de sus diseños. Una vez más las premisas de "menos es más" y "mejor insinuar que mostrar" se vieron reflejados en sus diseños de noche. También ha defendido siempre que el accesorio perfecto para cualquier prenda es un buen perfume, y el de su firma busca serlo.

Carolina Herrera, durante toda su carrera ha sido capaz de dar valor a la camisa blanca, un básico que permite vestir a la mujer con un estilo casual o totalmente elegante. Su último desfile cerró con diseños en los que se combinaba la camisa blanca con faldas largas en llamativos colores en contraste con anchos cinturones. Además volvió a reivindicar el esmoquin como una prenda totalmente apta para la mujer poderosa.

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