El dúo mexicano compuesto por los hermanos Jesse & Joy, aterriza en la capital española con su tercer disco, tras haber realizado un concierto en Barcelona. Su particular sonido involucra al público desde la primera nota y cada canción parece una caricia al alma. Y sí, parece demasiado romántico, pero es la expresión más adecuada para describir esta voz tan peculiar como dulce e hipnotizante: la de Joy.
El concierto estaba programado para que iniciase a las 21.00, sin embargo se retrasaron unos cuantos minutos más. El público ansioso de poder escucharlo al galardonado dúo mexicano, quién cuanta con varios Grammy's así como otros premios importantes de la música, no decepcionó a sus fans. La primera canción fue No soy una de esas, uno de los singles del álbum que cantan junto a Alejandro Sanz.
A continuación vendrían Chocolate, Llorar, Con quién se queda el perro y Llegaste tú cuyos éxitos son de discos anteriores. Antes de la tercera canción, Jesse & Joy saludaron al público madrileño por primera vez: "¿Madrid cómo están?", dice Joy. "Qué rico sentir tanto calor de hogar estando tan lejos de casa. ¡You guys rock!. Olé", responde Jesse. "Agradecidos. Es un gusto, es un placer, es una gran alegría estar aquí compartiendo con todos ustedes que nos regalan un poco de su tiempo. Que nos prestan sus oídos, que se presten para estar en una noche donde no somos de nadie y somos de todos. Somos Jesse & Joy y por las siguientes horas, ¿les parece si sólo somos una familia?", finaliza Joy de forma cariñosa. Sin embargo Jesse quiere puntualizar algo: "Antes de empezar ¿quién viene solo esta noche? ¿Tú y tú vienen solo? Pues dense un abrazo. Hoy vamos a ser todos uno. Vamos a ser una auténtica familia". Entre risas dice Joy, "igual salen de aquí y conocen al amor de su vida". Después, comenzarían a tocar uno de sus grandes éxitos cuya composición y actuación original es al lado de Mario Domm (integrante del grupo Camila). Este gran trabajo discográfico realizado en su mayoría en Londres. Sin duda, las colaboraciones de Juan Luis Guerra, Alejandro Sanz y Gente de Zona hacen del reciente álbum una particular combinación de ritmos.
Estos se verían reflejados en el escenario con Mi tesoro, Un besito más, Me soltaste, Corre, 3 a.m, Espacio sideral, La de la mala suerte, en los que también aprovecharon para recordaron canciones destacadas a lo largo de su carrera. Los músicos que les acompañaba no dejaban de bailar y ser una verdadera orquesta que no dejo indiferente a nadie.
Uno de los momentos más cercanos y conmovedores fue cuando Jesse & Joy contaron que: "De verdad qué increíble público desde la persona de la última fila hasta la de acá (Jesse señala a las personas al pie del escenario). Como saben Joy y yo somos hermanos, la música siempre ha sido nuestra compañera fiel tanto en las buenas como en las malas".
En ese instante una fan alocada interrumpe su discurso y le grita "¡Guapo!" y su respuesta fue "ven te voy a dar un abrazo y un beso". A lo que Joy responde: "Te lo dicen porque somos igualitos ¿verdad?."
"Su padre es una estrella que siempre les cuida"
Jesse continúa hablando y explica qué hace más o menos un año perdieron a "un ser muy querido", a su padre. Tras su fallecimiento y por cómo se sintieron, quisieron dedicarle una canción que es la que da nombre al disco: 'Un besito más'. En ella, le dicen que esperan reencontrarse con él para darle ese último beso. Para ellos, su padre es una estrella que siempre les cuidará. Por ello, ésta aparece en el disco y en el escenario como símbolo de este tercer álbum.
El clima de ternura que se crea ameríta como bien pide Joy, que la gente saque sus móviles y encienda una luz por todos aquellos que se merecen un besito más. Ella reivindicativa y solidaria nombra a los refugiados, y a los afectado por los fenómenos naturales en México y Estados Unidos. Joy invita a los asistentes a construir un cielo estrellado en su memoria, entendiendo que al final: "Todos somos uno mismo." Al instante comienzan a cantar Un besito más.
Después, unas fans les acercan regalos al escenario y dice Joy emocionada, "así, no me voy a querer ir nunca". De esta manera, llegaría otro de los momentos más tiernos de la noche, junto a Me quiero enamorar, canción en la que subieron a una niña llamada Martina al escenario, quien les confesó que no se sabía la canción y Jesse se la dedicó.
Más tarde, vendría el final y los hermanos Huerta se despidieron con Ecos de amor y Dueles, dos de sus singles más recientes, que cuentan ya con millones de reproducciones y descargas en YouTube y en plataformas digitales. Amigables, cálidos y amorosos dejan claro que España les encanta y que volverían mas veces. Agradecidos y contentos por esa noche le dicen adiós a la "madre patria".