Nerea Parada -
“Somos lo que comemos”, la máxima dictada en 1850 por el filósofo y antropólogo alemán, Ludwig Feuerbach, ha cobrado vital importancia en los últimos años. Los términos bio, eco u orgánico reciben cada vez más adeptos, que se preocupan de la procedencia de sus alimentos, de que éstos estén libres de elementos contaminantes y de que su producción sea respetuosa con el medio ambiente.
En la actualidad, un gran número de viajeros busca consumir estos productos durante sus vacaciones o escapadas. Para ello, el hotel Barceló Montecastillo de Jerez de la Frontera ha creado proyecto que favorece la cadena alimenticia dentro de la tendencia eco: un huerto ecológico, un menú vegano y un curioso hotel de insectos. El principal objetivo es dotar al restaurante del hotel de una gran variedad de alimentos saludables: berenjenas, calabacines, pimientos, calabazas, melones, sandías y tomates entre otras cosas. Y proteger a muchas especies de insectos en peligro de extinción con un coqueto y sorprendente alojamiento para avispas, abejorros, abejas o mariquitas, que desarrollan un papel fundamental en el ecosistema.
Además, para concienciar a los más pequeños sobre la importancia de comer bien, el Barceló Montecastillo ofrece actividades de cocina y horticultura.
En definitiva, el hotel es el máximo exponente del Healthy and Wellness Hotel, contando con menús Gourmet saludables en su restaurante; con un gran complejo deportivo con: campo de golf, pista de tenis, de paddle y de jogging, y varios campos de fútbol; y un tranquilo spa con: circuito de hidroterapia, saunas, hidromasaje y cabinas de tratamiento y gimnasio.
